Mi juventud no fue sino un gran temporal
Atravesado, a rachas, por soles cegadores;
Hicieron tal destrozo los vientos y aguaceros
Que apenas, en mi huerto, queda un fruto en sazón
Charles Baudelaire, El enemigo
Charles Baudelaire, El enemigo
Todavía alumbra cuando intento que no.
Dios sabe por que,
Dios siempre sabe y no me dejo saber.
Todavía se tuestan cuando la clarividencia es blanda.
Y bajo siempre enquistado a la casualidad,
y sigo obrando como un buda, amasándome por
un prolijo quehacer.
De ojos salpicados,
biónicas linternas
y en cada onda de producto,
humeantes coladeras hacia
un Andy Warhol desentendido.
Y no veo por que...
Todavía desvaría cuando
nieva.
Todavía las comadres cuando
canto solo.
Todavía los colores cuando duermo en daltonismo
Y rodantes cartamores
murmurando tras la nictálope alucinación.
Dios tendrá que saber...
Dios sabe por que,
Dios siempre sabe y no me dejo saber.
Todavía se tuestan cuando la clarividencia es blanda.
Y bajo siempre enquistado a la casualidad,
y sigo obrando como un buda, amasándome por
un prolijo quehacer.
De ojos salpicados,
biónicas linternas
y en cada onda de producto,
humeantes coladeras hacia
un Andy Warhol desentendido.
Y no veo por que...
Todavía desvaría cuando
nieva.
Todavía las comadres cuando
canto solo.
Todavía los colores cuando duermo en daltonismo
Y rodantes cartamores
murmurando tras la nictálope alucinación.
Dios tendrá que saber...
mija
Oscurantismo
No hay comentarios:
Publicar un comentario